Se acaba otro verano sin acondicionador de aire. Es tiempo de
apagar el ventilador y guardarlo en el armario.
- Pero… no puedo.
- Si lo apago tengo calor, si lo enciendo me enfrío. Creo que es
psicosomático.
- Al principio me molestaba el ruido. Aunque es muy suave, en el
silencio de la noche suena como un biplano de la primera guerra mundial. El
calor y la falta de aire acondicionado me obligaron a acostumbrarme y ahora no
puedo dormir sin oír su cariñoso susurro.
- Lo llamo Eolet II, hablo con él, le tengo aprecio.
- Constantemente lo cambio de dirección, distancia, inclinación,
le afilo las aspas, lo aceito, lo perfumo. Para la fiesta mayor le pinté rayas
de colores y lentejuelas. Qué risas!
- Le he instalado un regulador de intensidad para controlar su
problema con el soplo.
- A mitad del verano se me murió Eolet 1º y, como muestra de
luto, estuve todo un día sin aire. Al siguiente enchufé Eolet II que es quien
me acompaña ahora.
- El aire me ha provocado gripe y por eso lo tengo apuntando
hacia una pared. Pero es como si estuviese castigado, Eo no lo merece. Le hace
sentir culpable de mi estado cuando él solo cumple con su deber.
- Lo he regulado al mínimo de revoluciones pero así el motor
sufre, hace un ruido sucio y le ha subido la temperatura. Estoy preocupado.
- Hemos pasado mala noche. Yo con pesadillas de fiebre, Eo con
ese gruñido asmático que no suena nada bien.
- Esta mañana se ha parado y he tenido que salir tiritando de la
cama para subirle un poco la velocidad. Ha chillado y yo he llorado un poco.
- Tengo sueños geométricos, abstractos. Soy astronómicamente
gigantesco mientras Eo es una mota de polvo infinitamente pesada perdida en la
punta de mi dedo. Me siento insoportablemente culpable de no se qué.
- Me mira con una tristeza espiral, sabe que tiene las vueltas
contadas. Yo también lo se, el dolor se adelanta al duelo, me corta el alma.
- Llevo muchas horas sentado frente a Mi Amigo, cara a cara. El
regulador se ha quemado y Eo gira al máximo enviando mis lágrimas hacia atrás.
Su viejo motor echa humo.
- Un último abrazo, las aspas me besan los pulsos.
- La pena estalla en un cortocircuito rojo.
KarlosKosas
11-9-2013
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